Cuarteto de Nos en Chile: Fusionados con su público

Fotos: Javiera Villaseca
El rock alternativo de los uruguayos encantó a un Movistar Arena repleto y lleno de energía. Una velada de sábado que repasó los éxitos de la banda, además de su más reciente placa de estudio, Puertas, estrenado el pasado 22 mayo.
A las 20.00 horas en punto el fuego inicial lo prendió Estoy Bien, trío nacional de corte emo y post punk que deleitó a un público familiar. El tenor de la noche fue transversal en cuanto a edades con una fuerte presencia de jóvenes y niños. La banda entregó lo mejor de su repertorio con un sonido abrasivo y potente. Todo acompañado de una audaz y lúdica galería de imágenes repleta de cultura pop. “Que emoción estar tocando aquí, gracias por llegar antes y disfrutar con nosotros”, dijo Benjamín de la Fuente, guitarrista y voz principal. Una noche que quedará en los archivos de oro de una banda que está allanando su camino a convertirse en un nombre grande en la música chilena.
El buen recibimiento de Estoy Bien dio paso a una espera ansiosa por el Cuarteto. A eso de las 21.10 horas los uruguayos se adueñaron de un recinto que los acogió con una fuerza desbordante. Roberto Musso y compañía comenzaron con “Cara de Nada”, hit de su último álbum. Humo, fuego y un juego de luces estrambótico. Todo en conjunción hacia un sonido y rimas desafiantes. Un estilo que los uruguayos han cultivado con meticuloso cuidado y que ha sido abrazado con devoción. El cariño, los gritos y cada una de las estrofas fueron seguidas de manera fogosa por la multitud. Un aura cálida y enorme que emocionó a los músicos; “Gracias por este recibimiento Santiago de Chile, con esta convocatoria les agradecemos enormemente estar con nosotros acá”, declaró de forma gentil Roberto Musso.
Un espectáculo equilibrado. Las letras del Cuarteto apuntalan mucha crítica social, pero también cuantiosa ironía, humor, drama, alegría. Una propuesta ágil que movilizó de forma desafiante a su público. El júbilo fue total entre un público que dejó postales enternecedoras. Niños y jóvenes cantaron y siguieron a los uruguayos con el mismo fervor que los mayores presentes en el recinto. El único punto bajo lo marcó la interpretación de “Maldito Show” con la pérdida del sonido. Segundos de incomodidad que la banda sorteó sin sobresaltos.
Los pináculos del concierto estuvieron en “El Perro de Alcíbiades” y “Contrapunto Para Humano y Computadora”; ésta última siendo un enfrentamiento entre Roberto Musso y una inteligencia artificial. Una canción teatral que pone en cuestión el uso de la tecnología y las inteligencias artificiales. Un momento provocador, dramatúrgico y pujante. La rebeldía y frescura del concierto fue sintetizada por el agradecimiento y palabras de Roberto casi al final del espectáculo: “Más que un concierto esto parece una especie de terapia grupal”.
El concierto de anoche no solo significó un reencuentro del Cuarteto con su fanaticada chilena, sino que también fue el punto de partida del tour “Puertas”, que los llevará por toda latinoamérica, España y Alemania. Los uruguayos afianzaron su relación con Chile al demostrar su sabiduría artística y la evidente capacidad para encantar a grandes y chicos. Un legado único, mágico y enternecedor. Un tesoro para el rock latinoamericano.