Jinjer – «Duél»: Un álbum Brutalmente honesto

Jinjer – «Duél»: Un álbum Brutalmente honesto

Jinjer viene impactando con su innovadora propuesta sonora desde ya varios años. «I Speak Astronomy», «Home Back» o «Pearls and Swine» son algunas pertenecientes a su catalogo que como si nada hacen que el groove metal progresivo en su versión más frenética sea el mejor amigo del jazz, el funk o el reggae, sugiriendo también el porqué entre muchos de sus fans se dice que Jinjer es un género musical por sí solo. En esencia, el soul y el groove de artistas como Amy Winehouse o Sade se dibujan entre las inspiraciones de la banda con mayor fuerza de la que se podría pensar.

El cuarteto siempre ha tenido afinidad por la música extrema, pero es en los últimos trabajos —desde Micro (2019)— que paulatinamente han explorado con mayor sintonía —y fuerza— aquellos matices, (coincidiendo por cierto, con la incorporación de Vlad Ulasevych, quien desde ese entonces es el principal encargado de las composiciones). «Pausing Death», «Call Me A Symbol» y «Mediator» te vuelan la cabeza.

El pasado 7 de febrero de este año los ucranianos lanzaron su quinta placa de estudio, ‘Duél’. Una placa que a propósito, se venía pensando como la propuesta más pesada de ellos hasta la fecha. Los singles de adelanto daban indicios de que sería así y de todas formas se puede concordar que hay mucha intensidad y ruido en cada una de ellas, pero en realidad, los mismos músicos te dirían que es una mera percepción y que por el contrario, en este álbum hay muchos más pasajes melódicos que, por ejemplo, en su antecesor ‘Wallflowers’.

‘Duél’ consta de 11 canciones, pero desde agosto del año pasado las mentes creativas nos vinieron anticipando con 6 de ellas. Incluso en su gira sudamericana —y paso por suelo chileno— de un par de meses atrás interpretaron 5 [de ellas] y ya nos esbozaban la cúspide del encuentro entre la brutalidad e introspección en la que la banda se ha visto inmersa en los últimos años. Un duelo que se hace inherente contextualizar entre la guerra aún vigente entre Ucrania y Russia y las inquietudes individuales de la encargada de las letras.  «My excuse is to define the truth in the battle between me and you» («Mi excusa es definir la verdad en la batalla entre tú y yo»)

En tanto la instrumentación del bajo de Eugene y la guitarra de Roman ocurren con sólida complejidad, el sonido de la batería de Vlad retorna a un cuerpo mucho más materializado, y la voz de Tatiana conduce a la misma a la cima del control vocal entre lo limpio y lo gutural desde el primer segundo de la apertura «Tantrum» o través de temas como «Rogue», «Fast Draw» y la homónima «Duél», «Someone’s Daugther» o «Green Serpent» por su parte, son el clímax de la sinceridad en el mensaje. Respectivamente, una reflexión —o declaración— de empoderamiento femenino y  luego, de aquellas [canciones] más personales escritas por la cantante mientras lidia con su rechazo al alcohol en contexto de sus tres años sobria —además de ser una favorita instantánea tanto para los fans como para la misma banda, especialmente, por cierto, Tatiana—. 

“It’s starting here. / You don’t drink it, you absorb it. / Eventually you’re swallowed by the mud.

Here it comes, the green serpent. / It puts you on the path, so unsure.

The serpent gives an umbrella on a sunny day / And takes it back when it rains.

It holds so much annihilating power / So it’s turning saints into sinners in just one hour.”

(“Comienza aquí. / No lo bebes, lo absorbes. / Eventualmente tragas el lodo.

Aquí viene, la serpiente verde. / Te pone en el camino tan inseguro.

La serpiente te da un paraguas en un día soleado / Y te lo quita cuando llueve.

Sostiene mucho poder aniquilado / Convirtiendo santos en pecadores en sólo una hora.”)

(La serpiente, una metáfora al alcohol en la cultura eslava tradicional de oriente.)

En el transcurso del tiempo, Tatiana no sólo ha tenido su crecimiento como cantante, principal letrista y —de forma paralela— fotógrafa, sino que aparentemente también ha ido tomando el rol de directora creativa en Jinjer. Es la artista detrás de las portadas de ‘Cloud Factory (2014) y ‘Wallflowers’ (2021). Ahora, en su mero capricho, el álbum ‘Duél’ es llamado así y con un tilde en la e a raíz de la percepción inicial que ella tenía sobre las letras y dirección musical del LP: Un guiño a la estética del siglo XIX. 

El proceso de este nuevo álbum, sin embargo, encontró a Tatiana en un bloqueo artístico que por muchos meses le dificultó llevar sus ideas a la pluma. Eso es al menos lo que ella misma había dicho en más de una ocasión. Pero como es habitual, la inspiración llegó en el momento indicado y afloró una vez más lo más auténtico de sí misma, en esta ocasión de la mano de un manifiesto de sus compañeros en un motivo por crecer y expandir sus propios horizontes musicales como nunca antes. ‘Duél explora groove metal, death metal, metalcore y djent progresivo en su ensamble más cohesivo.

Vicente Andrade

Anneke Van Giersbergen es mi statement artístico

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *