Nina Simone y Floor Jansen: dos iconos nacidas el 21 de febrero

Eunice Kathleen Waymon, fue una de las artistas más influyentes de la música en el siglo XX, conocida por su capacidad de conjugar el góspel, el blues y el jazz nació un 21 de febrero de 1933 en Carolina del Norte. A muy temprana edad, Nina comprendió el estigma que azotaba a la población afroamericana en su entorno y fue entonces, que emprendió un camino en contra del racismo y la segregación, dando visibilidad de esta problemática a través de su música, teniendo por objetivo convertirse en una destacada compositora en los Estados Unidos.
Precisamente sus experiencias hicieron que se aferrara a sus metas, y aunque su precaria situación económica le impidió costear sus clases de piano, ella no se rindió. A escondidas de su madre y con un sueño claro, nace Nina Simone, pseudónimo que fue utilizado para ocultar su identidad, para así poder perseguir sus anhelos. Comenzó tocando en bares locales donde ofrecía un show de piano, demostrando el dominio que poseía, pero poco a poco la música por sí sola no fue suficiente y para no perder su empleo tuvo un desafío mayor: cantar, a partir de ahí, el resto sería historia.
Triunfó casi desde el primer momento, al punto de que en una de esos improvisados conciertos conoció a Sid Nathan de Bethlehem Records, quién le ofreció su primer contrato con el sello y aunque grabó algunos demos, no percibió ninguna regalía de su trabajo sino hasta 50 años después. Estudió en la prestigiosa escuela de música Julliard Academy, cuna de grandes artistas.
Nina Simone no ignoró la lucha de los suyos, y prestó su voz para abanderarse contra el gobierno que coartaba los derechos civiles de la población afro en plena época donde la discriminación racial alcanzaba su punto más álgido en el país. Su directa participación en la lucha, ha sido uno de los legados más importantes que dejó en la historia.
La canción «Mississippi Goddam» la compuso en respuesta a un atentado donde murieron cuatro niñas afroamericanas en una escuela de Birmingham. Así, dedicó su vida a expresar su ira contra la discriminación, muriendo finalmente a los 70 años de edad producto de un cáncer de mama, otra lucha que hasta el día de hoy impacta a la población femenina, siendo una de las causas de mayor tasa de mortalidad por esos años. A través de su música y su vida, Simone dejó una huella imborrable en el mundo de la música, inspirando a generaciones de artistas y activistas.
Floor Jansen
Cantante y compositora neerlandesa, Floor Jansen nació el 21 de febrero de 1981. Desde joven, mostró interés y talento natural para la música, uniéndose a varias bandas locales de los países bajos, sin embargo, no fue hasta 1995 que explotó su carrera musical al unirse a las filas de After Forever, agrupación que la hizo ganar reconocimiento dentro de la escena metalera, donde pudo desarrollarse como compositora y vocalista de manera más profesional.
La habilidad vocal de Floor, la ha hecho experimentar con diversos géneros como el metal gótico, sinfónico y progresivo, pudiendo fusionar el canto lírico con el gutural, de esa manera, explorar sus capacidades. Así, en el año 2012, se unió a Nightwish como la tercer y actual vocalista de la agrupación, marcando una nueva etapa para la banda que recientemente había perdido a su anterior voz, un hito que la llevó a tener el reconocimiento de hoy en día.
En el 2023, Jansen lanzó un proyecto en solitario titulado «Paragon» que es un disco más bien personal, donde explora otras aristas musicales. Si bien, su canto operístico es el responsable de su éxito, este álbum, es un poco más rock, donde destacan los elementos melódicos, presentando un sonido más íntimo y accesible.
Al igual que muchas mujeres en la industria, ha tenido que probar su valía en la escena metalera, por la que para muchas artistas mujeres jóvenes es un ejemplo a seguir, pues es una de las voces más completas y versátiles dentro del metal, Floor se ha ganado el respeto y admiración en su tribuna.
Sin duda, febrero vió nacer a dos estrellas destacadas en la música, que han inspirado no solo a través de melodías, sino que con su historia de vida, siendo un ejemplo de perseverancia, resiliencia y empoderamiento femenino.