Simple Minds y su grito de esperanza: «Alive and Kicking»

Corrían los años 80s cuando Simple Minds lanzó el primer sencillo de Once Upon a Time, uno de sus discos más exitosos hasta el día de hoy. Y es que nadie puede ser indiferente a la icónica «Alive and Kicking», este hitazo de 1985 llegó para revolucionar a los oyentes com ese ritmo alegre y pegajoso protagonizado por los teclados, sintetizadores y batería que en conjunto a las cuerdas y voces de Jim Kerr y la solista Robin Clark –invitada como vocalista para álbum– completan de manera prácticamente perfecta esta emocionante pieza que se mantuvo en el número 3 de los Billboard Hot 100 por varias semanas.
Desde los primeros segundos, la canción envuelve con una introducción instrumental poderosa, marcada por acordes ascendentes de piano y un groove rítmico que genera una sensación de constante movimiento. El bajo aporta solidez y profundidad, mientras las guitarras, cargadas de efectos y texturas, abren espacio para un canto que no busca ser escuchado. La producción, a cargo de Jimmy Iovine y Bob Clearmountain, resalta el carácter épico del tema, típico de la segunda mitad de la década, con una mezcla brillante que potencia cada capa de sonido sin saturar.
El mensaje central de su letra radica en el amor y la esperanza a través de una visión que invita a cuidar, proteger y comprometerse cuando la situación se torna un tanto difícil. Una invitación a mantenerlo “vivito y coleando”. La alegre melodía inspiró una letra igualmente optimista de Jim Kerr, quien contó a SongsFacts “Estábamos en Nueva York, en verano, en Manhattan. Podíamos sentir que la banda estaba realmente al borde de algo, y creo que esa posibilidad y esa idea de esperanza formaron la letra”.
Robin Clark participó en la gira promocional del One Upon a Time y en el posterior disco en vivo Live in the City of Light grabado en París y Sidney, lanzado en 1987. También apareció en el video de «Alive and Kicking», «All the Things She Said» y «Sanctify Yourself». La vocalista es además esposa de Carlos Alomar, uno de los guitarristas favoritos de David Bowie, y ha trabajado junto al Thin White Duke en el legendario Young Americans, donde también participó en los coros.