Cancionero Rock: «Sludge Factory» – Alice in Chains (1995)

Cancionero Rock: «Sludge Factory» – Alice in Chains (1995)

“Sludge Factory”, el track 3 del disco homónimo de Alice in Chains (1995), esconde una entretenida historia que da cuenta de la relación de Layne Staley con su compañía discográfica (Sony), y además, del carácter introvertido del superdotado vocalista.

Cuenta Toby Wright, productor del disco, en el libro “Everybody Loves Our Town” de Mark Yarm, que mientras la banda grababa el álbum (proeza nada sencilla por esos días para Cantrell y compañía y cuando el disco de Mad Season se comenzaba a hacer popular) que un día de madrugada, cuando la banda estaba en plena sesión de grabación, Layne Staley recibió un llamado de parte de dos ejecutivos de Sony, Donnie Ienner y Michele Anthony, para “felicitarlo”. De acuerdo al testimonio, luego de las felicitaciones los ejecutivos fueron claros: “por cierto, tienes nueve días para terminar el disco”.

Esta conversación telefónica dio origen a la letra de Sludge Factory, específicamente la segunda estrofa:

“Call me up congratulations
Ain’t the real why
There’s no pressure besides brilliance
Let’s say by day 9
Endless corporate ignorance lets
Me control time
By the way, by the way, by the way, by the way”

Una vez que el disco fue editado y comenzó a cosechar éxitos, la banda fue invitada por la cadena MTV para uno de sus MTV Unplugged, por esos días un hito fundamental para la carrera de los artistas del mainstream. En dicho concierto, que resultó ser perfecto, todos quienes hemos tenido oportunidad de ver el video de la presentación, vemos cómo Layne se equivoca al comenzar Sludge Factory, lo que da pie a un relajado momento que muestra la espontaneidad de la banda, y a un frustrado Layne gritando “Fuck!”. De acuerdo a lo que señala Toby Wright, esa noche en la primera fila del público se encontraban ambos productores, Ienner y Anthony, por lo que los nervios de Layne en ese momento se pudieron deber a eso. Después del error, la banda hace una interpretación notable, por cierto.

Layne Staley no solo fue conocido por ser un vocalista y frontman privilegiado, para muchos el mejor de la generación grunge, sino que, entre sus más cercanos, lo describen como una persona muy afable, pero además tremendamente tímida y que, tristemente, estuvo permanentemente bajo vigilancia por su drogadicción. Este episodio grafica muy bien su personalidad.

El tema es uno de los grandes de ese tremendo homónimo, muy oscuro y con unos riffs inmensos, acá lo recordamos y el momento que comentamos en cuestión en el Unplugged:

Por Felipe Godoy Ossa

Nacion Rock

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *