Chancho en Piedra y Las Pelotas: La tarde de rock latino en Lollapalooza Chile 2018
El año pasado, los Chancho en Piedra celebraron en grande el aniversario de “La Dieta del Lagarto”, con un espectáculo macizo y que conjugó diversos elementos que mostraron el proceso que han vivido como banda. Por el éxito en convocatoria y buenos comentarios que derivaron de ese show, fueron invitados, por segunda vez, a Lollapalooza Chile con la intención de que siguieran celebrando el cuarto de siglo de esta obra, la que reúne fuerza a raudales pero que matiza con la exploración de otros sonidos. La familia marrana ha sido siempre fiel, por lo que el escenario principal fue ideal para gozar cada acorde de este disco, que ya se instaló como parte fundamental del Chile pre-nuevo milenio.
Con una buena descarga de funk rock, punk, disco, soul, y otros estilos, los Chancho crearon un enorme clímax en cada tema; no todas canciones fueron repasadas, por asuntos de tiempo, mezclaron el orden para terminar con “Edén” y sellaron con un homenaje a Los Ramblers, con la intro de “El rock del Mundial”. Sus atuendos representaban la gráfica del álbum, al tiempo que el público, que logró pasar los “juanitos” en las puertas de control, se dio la mano con la historia y todo fue un disfrute basado en una palabra: consistencia. La sección de bronces, liderada por Héctor “Parquímetro” Briceño y la participación del DJ humitas, dieron aún más solidez a la presentación, dejando claro que para ellos este espectáculo no era solo “repasar” un disco, sino que fue una invitación a vivirlo como una fiesta acústica, amenizada por la interacción constante.
En cada elemento que agregaron al show, Chancho en Piedra deja de manifiesto lo relevantes que son para la escena musical local.
Las Pelotas: espíritu inalterable
Tras la reprogramación de bandas sufrida la tarde del sábado, Las Pelotas vieron retrasado en dos horas su presentación en el Itaú Stage. La movida los favoreció, pues a las 16 hrs había mucho público y éste se congregó para ver en acción a esta banda trasandina, que nació luego de la disolución de Sumo en 1988. Han cosechado una carrera muy exitosa y se presentan en escenarios de mucho renombre, sin embargo, en nuestro país no son tan conocidos y, de hecho, no venían hacía tiempo.
Liderados por el ex Sumo Germán Daffunchio, ofrecieron un show que repasó parte de su historia, cerrando en lo alto con “El Ojo Blindado”, clásico de Sumo. Si bien, Daffunchio se midió bastante y no fue tan comunicativo con el público, como sí lo es en su país, se percibió en cada nota la necesidad de no perder la rebeldía que inundó el espíritu de la juventud argentina en los ’80, y que se transmitió a los países vecinos justamente a través de la música, siendo Sumo una gran bandera de este movimiento. El que sigan teniendo la misma actitud y que le den un nuevo sentido a sus canciones, considerando los hechos político-sociales que azotan al mundo y a nuestros países, los discursos siguen estando plenamente vigentes.
En esta hora de show quizás faltaron los bailes y el mosh, pero lo que sí hubo fue mucho respeto hacia una banda que, tras la cordillera, lleva en sus hombros el peso de parte de una historia de la sociedad argentina.
Por Macarena Polanco G.