Kiss y su influencia en el rock: El innegable legado de los dioses del trueno

Difícil sintetizar lo que significa asociar Kiss a la palabra “influencia”. Porque no sólo se remite a lo musical. Hay influencia en cómo una banda de rock se transforma en parte de un movimiento adolescente, hay influencia en cómo una banda puede aprender a explotar una imagen, hay una clarísima influencia en el posterior movimiento “glam”, hay influencia en darle importancia a la espectacularidad de los conciertos, hay influencia en ser precursor del denominado “rock de estadio”, hay influencia en el movimiento del cómic y hasta influencia en el marketing que tan desarrollado tiene el rock, y cada banda, en la actualidad. Todo lo anterior fue y es Kiss.

Musicalmente, bandas de calibre como Mötley Crüe, Dokken, Bon Jovi, Skid Row, Anthrax, Iron Maiden, Metallica y tantas más han declarado que su música no sería posible si no hubieran escuchado a KISS. Este legado traspasa décadas y cubre a grupos más actuales como Black Veil Brides, llega también hasta el country de Garth Brooks y al pop de Lady Gaga, para quienes los neoyorquinos son piedra angular de su propuesta.

Sin dejar de lado lo musical, fue el maquillaje lo que ayudó a distinguir a Kiss de la multitud. Esto les dio un sello, les ayudó a ganar atención y adeptos rápidamente. Reconociendo que años antes fueron David Bowie, Alice Cooper y la locura de Arthur Brown los que pintaron su cara, creando una estética que era parte de su mensaje, Kiss explotó con mayor pirotecnia este recurso, sirviendo de inspiración al corpse paint o máscaras de bandas posteriores como Slipknot, Marilyn Manson, Mercyful Fate, Misfits, Inmortal y tantísimas otras.

Cada integrante, por separado, también hizo valiosos aportes. Ace Frehley produjo los primeros demos de W.A.S.P. Eric Carr fue el manager de Hari Kari, Gene Simmons apostó por Van Halen en sus inicios, produjo dos álbumes de Keel  y estuvo involucrado en el debut de la alemana Doro.

El ritmo asfixiante y demoledor del llamado “black metal” fue salvajemente influenciado por Kiss. “God of Thunder” es un tema icónico de este movimiento porque hay un ritmo poderoso, y la voz de Simmons se vuelve gutural añadiéndole esa onda “black” tenebrosa, que sería el sello del género. Este movimiento tuvo un declive a finales de los 90’s para renacer con mucha fuerza en Escandinavia, creándose incluso un movimiento único denominado «auténtico black metal noruego», el que se caracterizó por melodías frías, sombrías, letras oscuras y más satánicas. Grupos como Inmortal, Gorgoroth, Mercyful Fate, Mayhem y varias más heredaron el «corpse paint», incluso King Diamond tuvo una disputa con Gene Simmons por el parecido que tenía el maquillaje que usaba el líder de Mercyful en comparación con el que llevó por años el vocalista de Kiss. Turbo Negro y  Glucifer son bandas noruegas más contemporáneas que también se basaron en la fuerza rockera-punk de Kiss.

Influencia a través de covers

Sumado a lo anterior, la influencia de una banda como Kiss se visualiza en la cantidad de covers que tienen sus temas. El que bandas de distintos países, corrientes y edades te versionen habla de trascendencia, y en Nación Rock hemos rescatado lo que, a nuestro juicio, es lo mejor de Kiss como propuesta de otras bandas:

Pantera: “She”.

Lo dijo muchas veces Dimebag Darrell: Kiss fue la banda que lo marcó, que lo hizo girar hacia el rock. De hecho, el disco “Cowboys from Hell” está dedicado al Kiss “original”, y no conforme con eso, Darrell se tatuó a Ace Frehley como señal de respeto. En la gira de 1997, los neoyorquinos los escogieron como sus acompañantes, e incluso se maquillaron como ellos en varios de los conciertos. La muerte de Darrell caló tan hondo en los veteranos que hasta le mandaron el ataúd propio de la banda para su sepultura.

Anthrax: “Parasite”.

Siendo “Anthrax” un gigantesco exponente del metal, creadores de temas dignos del mejor mosh, también se dieron tiempo para el cover; y qué tremenda expresión de rock es la versión que hicieron para este gran tema de Kiss. Impecable cómo Bello machaca el bajo e Ian se escucha demoledor en la guitarra. Benante transforma el tema a través de una batería maravillosa pero controlada. Son fieles al original pero cubren la versión con su atmósfera propia.

Nirvana: “Do You Love Me”.

Grabado en 1989 e ingresado como track al álbum tributo “Hard to Believe”, Nirvana interpreta este tema, propio de Kiss, grabado originalmente en 1976. En la versión, Novoselic da muestras de un tremendo trabajo con el bajo, en un momento en que los de Seattle aún no explotaban y estaban en la búsqueda de cuál sería su sonido.

Melvins: “God of Thunder”.

Si bien no fue single de Kiss es uno de los temas más buscados y coreados por los fans. El tema tiene una fuerte post producción que, finalmente, le da ese tono amenazante y oscuro. Melvins, seguidores acérrimos de Kiss, sacaron sus mejores acordes para coverear este temazo que estaría incluido en el “Hard to Believe”. La versión es retumbante, fría y teatral.

Dinosaur JR: “Goin’ Blind”.

Version interesante de la banda de Massachussets para este tema grabado en 1974, aunque es resistida por un amplio número de fans. La voz de J Mascis se oye distorsionada pero con buena melodía grunge, notándose la influencia de Neil Young; sin embargo, pensamos que no le da tributo a la original.

Kiss en Chile: 14 de abril 

Podría ser uno de los shows del año, por eso, si ya tienes tu entrada, puedes sentirte privilegiado porque podrás aplaudir a una verdadera leyenda, podrás decir “yo los vi”. A este show no hay que ir con el papel y lápiz ni con el oído agudo, hay que ir con el alma libre y deseosa de escuchar a una banda trascendente, influyente, y que muy difícilmente se volverá a presentar en Chile.

El acierto de The Fan Lab y The Knife ya tiene prácticamente todo el Movistar Arena vendido para un show que promete reencuentro con la esencia del rock clásico, donde ningún tema es desconocido, donde sólo se corearán canciones que forman parte de nuestra historia como fans del rock.

Con Star Lover, Demon Lizard, Space Ace y Cat Man en el corazón, lo que se nos viene el 14 de abril es nostalgia, algarabía, regocijo, canto y felicidad, de esas que sólo una buena banda de rock puede darnos. Si vas al concierto, estás invitado a una fiesta cuyo motivo es celebrar, junto con KISS, su tour de celebración de 40 años sobre el escenario, 40 años haciendo música, influenciando músicos y diferentes estilos. Toda una vida dedicada a la pirotecnia, las llamaradas, las baterías elevadas, las guitarras con humo; toda una vida destinada a crear un sello que marcó a generaciones, las que se reunirán en un solo coro este 14 de abril. Kiss simplemente nos puede regalar uno de los mejores días del año.