Nación Rock Awards: Los 20 mejores discos internacionales del año (del 10 al 1, Segunda parte)
Y acá los tops de tops, del 10 al 1:
10) Foo Fighters- Sonic Highways
Todo un proyecto, que brilló mucho más por su serie/ documental como por el disco mismo. Pese a que el primer adelanto ‘Something From Nothing» nos dejó a todos marcando ocupado, se nos fue cayendo con el paso de los tracks; eso sí, demostró momentos de intensidad notables y una cada vez mayor ganas de la banda de remitirse a sus más clásicos referentes. Lejano al “Wasting Light”, se desgastó al ser demasiado ambicioso sin brillar mucho finalmente.
9) The Raveonettes- Pe’ahí
Con algo de concepto de playa, asesinos en serie y vivencias personales, el regreso de los daneses sorprendió tanto como sus anteriores entregas, lleno de shoegaze escuela The Jesús & Mary Chain, My Bloody Valentine y demases, nos reúne el dúo un discazo lleno de canciones de ritmos beatlescos y ruidosos, de los cuales se extrañaban casi desde el período de gloria del noise. Un disco que se agradeció bastante.
8) Mark Lanegan –Phantom Radio
No hay caso con Lanegan, desde mucho tiempo a esta parte se está transformando en el Rey Midas de la música, proyecto que tiene, tanto con bandas, a dúo o en solitario, siempre sorprende, esta vez con un disco muy ambiguo, donde encontramos de todo, pero con destellos verdaderamente fulminantes.
7) Crosses-Crosses
Se nos había aparecido de a pedazos este disco, el debut de un buen proyecto de Chino Moreno, no tan agresivo como Deftones, ni tan post rock como Palms, pero si con claras cuotas de oscuridad y donde nos demuestra lo buen vocalista que es. Melodías muy pop seducen, pero también efectos pinkfloydianos y mucha mística hacen de este un gran disco 2014.
6) The Afghan Whigs- Do the beast
Está entre los pocos sobrevivientes de la armada original de Sub Pop que goza de excelente salud musical en la actualidad y se ha mantenido en constante evolución, en sintonía con los tiempos actuales y no viviendo de la nostalgia. Primero fueron los Twilight Singers, luego The Gutter Twins, pero al talentoso Dulli le faltaba registrarse en la historia de la década actual con algo de su banda madre: The Afghan Whigs. Es difícil decir algo sobre «Do the Beast», es simplemente un excelente disco, de excelentes canciones que se paran por si solas y forman un todo coherente. «Parked Outside», «Algiers» y «These Sticks» están entre las mejores del año, sin duda.
5) Kasabian-48:13
El disco/bomba del año. Sorprendente de principio a fin, apostando más que nunca al factor explosivo Kasabian nos deja un registro de grandes canciones, fiestero, sicodélico y también con algunas cuotas de oscuridad que son su marca. Pese a críticas por el giro radical (que pensamos que no lo es tanto) los británicos demuestran que están quizá en el mejor momento de su carrera.
4) Interpol- El pintor
Esta banda sí que levantó cabeza este año. Suena como a un clásico post punk pero con cuotas de modernidad precisas como para enmarcarlo dentro de los mejores. Hay momentos de rocanrol verdaderamente prendidos y cuando caen en las depresivas fragancias que suelen emitir pareciese que lo hacen mejor que nunca. Nos atrevemos a decir que es el mejor trabajo a la fecha de los neoyorquinos.
3) Robert Plant and the Sensational Space Shifters- Lullaby…and Ceaseless Roar
La ambición creativa este año no estuvo precisamente a cargo de los más jóvenes. Con «Lullaby…and Ceaseless Roar» el maestro Robert Plant nos recuerda por qué no le interesa otra reunión con Led Zeppelin: simplemente no lo necesita, está en otro espacio compositivo e interpretativo. Canciones que transitan entre el rock alternativo de Radiohead y sonidos musicales traídos de quizá dónde. ¿Tradición India? ¿Celta? Da lo mismo, «Lullaby…» nos trae una de las mixturas musicales más exquisitas de los últimos años. Si el año pasado fue el gran retorno de Paul McCartney, este año no podía ser nadie más que el maestro Plant. Si alguien duda de por qué Plant está encabezando el Lollapalooza Chile 2015, necesita urgentemente escuchar este disco.
2) Pink Floyd- The Endless River
El final del río. Pese a críticas ambivalentes, PF no hizo más que rememorar toda una escuela de sonidos clásicos, primero fue absolutamente sorprendente que lanzaran un disco nuevo luego de más de 20 años, y por más que fueran «pedazos» de canciones o descartes, cada descarte de Pink Floyd es casi mejor que un disco actual en realidad. Por lo que significó, por su regreso luego de tanto tiempo y por tratarse de la despedida de una de las bandas más grandes de todos los tiempos (y claramente por la cantidad de riffs geniales, inventiva, retrospectiva y nostalgia recuperada de gemas como el «The Dark Side of the Moon» o «The Wall) Pink Floyd es casi el disco del año.
1) Mastodon- Once More ‘Round the Sun
Era un disco que queríamos escuchar a toda costa, Los de Atlanta no hacen más que seguir dictando cátedra en inventiva propagada desde el metal más clásico, pasando por incursiones en el progresivo, melodías notables, atmósfera y brutalidad. Una de las bandas que ha sabido conjugar de manera más genial ambos mundos y esta placa logró ser el mejor ejemplo de aquello. Era difícil la elección, pero la genialidad de estos barbones, que pueden sonar metaleros a más no dar, prog rock como los masters y pop al mismo tiempo, dan cuenta del gran momento musical en que viven. Un discazo sacudecráneos, lleno de matices, con un arte increíble. En fin, es nuestro disco del año.
