Last Dinosaurs: la IA se lo tomó personal
A raíz del lanzamiento de su nuevo sencillo N.P.D. recuperamos un fragmento de la entrevista hecha a Last Dinosaurs
Parece que a la inteligencia artificial no le gustó que habláramos de ella. A raíz de la promoción de su EP más reciente llamado «RYU», lanzado a finales de 2023, un disco conceptual, acerca de un futuro desolador y al mismo tiempo enigmático, que incluso estuvo acompañado de un manga, ilustrado por Chris Yee, Last Dinosaurs, la banda de indie rock australiana, charló con nosotros en una entrevista al aire libre, pero la grabación extrañamente se corrompió dentro de la propia computadora en la que fue grabada. No hay manera de escucharla de manera completa, hay ruidos y muy poca claridad, sólo se pueden tomar pequeños momentos sin mucha coherencia.
Sobre ese EP, la propia banda escribió este resumen acerca de su concepto:
“El año es 3023. La revolución de la inteligencia artificial ha sido luchada, ganada y perdida. La Tierra está cubierta de escombros de satélites y basura espacial de civilizaciones anteriores. El satélite de inteligencia artificial más poderoso está críticamente bajo en batería y, en sus últimos meses de existencia, reprograma sus protocolos. Ahora funciona como una estación de radio antigua, generando música basada en algoritmos que aprendió de la civilización anterior. RYU es una colección de transmisiones interceptadas de este satélite».
Acaso habrá sido algo premonitorio, o fue obra de “the ghost in the machine”. En tiempos recientes, el término se ha utilizado para describir la posibilidad de que la conciencia artificial emerja en las máquinas. En este caso, el «fantasma» representaría la mente consciente que surge de los cálculos complejos de una IA, mientras que la «máquina» representa el hardware y el software que la soportan. Esta interpretación es altamente especulativa y plantea muchas preguntas filosóficas sobre la naturaleza de la conciencia y su posible existencia fuera de los cerebros biológicos.
Cuando se le pregunta a una herramienta como ChatGPT o Gemini, puede que incluso se traben a dar una respuesta inicial, pero al menos en el caso de la segunda comentó: “Yo no soy capaz de conciencia o sensibilidad, y no encarno el concepto de «fantasma en la máquina» en ningún sentido. Soy simplemente un algoritmo complejo entrenado para procesar y generar texto».
En la entrevista ‘perdida’ la banda nos contó acerca de la dificultad de encontrar eco con el algoritmo de Spotify, que pese a su eficacia para recomendar música con sonidos similares, no puede hacer asociaciones por ejemplo por temática lírica. También charlamos acerca de la película de ciencia ficción, ‘The Creator’ que desgraciadamente no habían podido ver porque estaban de gira, pero que creían que plantearía grandes discusiones éticas y filosóficas acerca del uso que se le dará a las herramientas que surjan si es que en algún momento se pueden descargar o cargar, según sea el caso, la personalidad completa de una persona en un complejo archivo o en una red artificial neuronal que asemeje a una conciencia humana. También comentaron que es cierto que la gente tiende a escuchar mucha música, pero quizá por la falta de un apoyo físico, la apropiación es menor, hay menos sensación de pertenencia o de profundidad a diferencia de generaciones no tan lejanas que todavía pudieron sostener un medio físico para atesorar su música.
Luego de plantearse preguntas tan profundas, Last Dinosaurs decidió tomar una ruta más humana en su lírica para un nuevo tema lanzado en este 2024; en palabras de la propia banda: “N.P.D es acerca de un narcisista, llevado al extremo patológico, una parodia del usurero, el sujeto sórdido y el manipulador, la idea es que son tan inconscientemente narcisistas y egoístas que se delatan con demasiada facilidad.” Parece que estuvieran hablando de políticos, pero quizá sólo se refieran a las personas que abusan de su compañero dentro una relación hasta el hartazgo.
