Thursday en Chile: La resistencia del espíritu

Thursday en Chile: La resistencia  del espíritu

En un frenético concierto los músicos estadounidenses cumplieron con su esperado debut en Chile

La seguidilla de conciertos alternativos ocurridos en nuestro país sigue viento en popa, y el turno de Thursday – quienes anecdóticamente llevaron a cabo su concierto el jueves 04 de abril en sala Metrónomo – vino a contribuir y a seguir saldando la tan anhelada deuda de los fanáticos del screamo y post hardcore de la década del 2000. Geoff Rickly y compañía lo dieron todo en un show de una hora de duración. La respuesta en general fue muy enérgica y positiva, aunque algunos asistentes se quejaron constantemente del sonido del recinto y lo breve del concierto. Es entendible, el grupo demoró más de dos décadas en visitar tierras sudamericanas, y la experiencia tenía que ser memorable.

El grupo oriundo de Nueva Jersey venía girando con Tim Kasher, reconocido músico del circuito alternativo quien solo con guitarra al hombro y su voz tenía la misión de prender los motores al debut de Thursday. Hizo una revisión de canciones de su trabajo solista, y de Cursive junto a The Good Life. Hubo una rápida química entre los asistentes y el músico, quien logró generar un ambiente ameno mientras la gente consumía tragos y conversaba.

A las en punto ingresa el plato fuerte, y los esperados clásicos empiezan a salir uno a uno sin mucho preámbulo. De forma explosiva «At this velocity» no dio mucho espacio a pensar, sino mas bien a inmediatamente comenzar a disfrutar de la noche. Rickly se sentía en casa, lo hizo notar en varias ocasiones al agradecer la recibida del público chileno, además que desde el primer momento los asistentes empezaron a subir al escenario para volver a lanzarse al río de gente. «Divison St.» y «Signals over the Air» siguieron manteniendo arriba el frenesí.

Posiblemente un acierto fue haber recorrido principalmente canciones de sus dos placas más reconocidas: «Full Collapse» del 2001 y «War all the Time» del 2003. El público estuvo en el bolsillo del grupo en todo momento, los celulares prendidos y la celebración del cumpleaños del guitarrista Steve Pedulla dieron prueba de aquello. «Fast to the End» y «Standing of the Edge of Summer», junto a otras más hicieron destacar al baterista Tucker Rule quien con mucha energía y precisión mantuvo siempre arriba la dinámica de las canciones.

La recta final compuesta por «For the Workforce, Drowning» «The other side of the crash/over and out (of Control)» y la clásica «War all the time» demostraron que aquel espíritu juvenil de los 2000 sigue vigente, y que el fanático local sigue siendo leal a aquellos sonidos que conmovieron aquellos años desde una arista más alternativa. Ni siquiera quienes se familiarizaron posteriormente con aquellas tendencias, podrían ser indiferentes con aquel fervor.

Rodolfo Galleguillos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *