Trap Metal: ¿Qué es? ¿Por qué produce tantos anticuerpos en el ala conservadora metalera?

Trap Metal: ¿Qué es? ¿Por qué produce tantos anticuerpos en el ala conservadora metalera?

En la última década muchos nuevos géneros musicales han aparecido y parece que la expansión de esta especie de enredadera de propuestas en el árbol genealógico de la música no tiene ni tendrá límites. Por más que se piense que en la actualidad «todo está hecho», siempre aparecen propuestas que intentan romper moldes establecidos. La imaginación, ingenio y creatividad, combinada con la tecnología, los accesos y la inmediatez de la creación artística, nos dice que esto seguirá fluyendo y en muchas más direcciones. 

Hyperpop, blackgaze, tropical house, vaporwave, nintendocore, egg punk, witch house son géneros que han llamado cierta atención por su extravagancia, rareza y fusión, pero el trap metal es uno que ha logrado hacer eso y más: enojar a cierta parte de la comunidad metalera dura, o coloquialmente llamada «TRVE». 

¿Porqué? 

Pasa que esta parte del fan del metal, siente la necesidad de apropiación del género, lo que lo lleva a sentir que cualquier otro género combinado con el heavy, thrash, death o black (los supuestos géneros metal estandarizados) es desvirtuar un sonido que debe ser rígido, infranqueable e inamovible por excelencia, e incluso se empecina en burlarse y menospreciar todo lo que atente contra este género en estado duro, lo que lleva al «TRVE» a cometer un acto social discriminador, prejuicioso y hasta violento (principalmente en redes sociales, donde fluye su «valentía y audacia» principalmente) y en efecto, menospreciar/desvalorizar cualquier combinación con su «precioso» (el metal puro, mío, verdadero, que guardo bajo mi almohada y que no es de nadie más). Incluso insultando, poniendo caras de payasitos, riendo a carcajadas mayúsculas y lo que es peor, amedrentando y amenazando al medio que lo difunde o a la persona que expresa simpatía por el subgénero.  

Sin embargo, la comunidad que es más abierta tiende a no solo aceptar estas propuestas, sino también a abrazarlas, a introducirse de forma muy curiosa a lo que este nuevo sonido, que toma elementos de varios lados, puede ofrecer. Se siente emocionada incluso al sentirse estar descubriendo algo novedoso que quizá pueda hacer pisar en terrenos nunca antes visitados, y con suerte, te pueda llegar a volar la cabeza.

El fenómeno es sociológico y obedece a varios factores (educación, cultura, tu forma de absorber/interactuar con la música, entorno social -el grupito de amigos-e ideales sociopolíticos incluso). Y no solo pasa con los metaleros, también con cualquier fundamentalista de su género musical y que se puede sentir «amenazado» por el surgimiento de algo nuevo, disruptivo, que tome elementos de «SU» género.  La verdad es que la música nunca fue hecha para elegidos y solamente está, es cosa de tomarla, disfrutarla, y si no te gusta, simplemente la puedes desechar pacíficamente y «que pase la siguiente».   

Sobre este género qué podemos decir: no solo es metal y trap, conjuga varios elementos, que lo pueden volver bueno o malo desde tu perspectiva. Posee algo del arte callejero del rap y ese hip hop de rimas muy aceleradas, con algunos condimentos del shock rock/metal/industrial (Korn, Marilyn Manson, Nine Inch Nails) e incluso recoge en algunos casos la estética vampírica, propia del rock gótico o dark, pero siempre en una óptica diferente, muy 3.0, vanguardista y sin miedo a probar. 

Kim Dracula (inspirado desde el nombre en Deftones) se podría decir es más mainstream y convencional, pero además explora con vientos y cuerdas, toma prestada la sórdida impronta de Snarky Puppy o Mr. Bungle;  Nothing, Nowhere a ratos lleva las cosas un poco más al límite explotando en ruido; $uicideboy$ probaron con Munky de Korn y Travis Barker, lograr exportar música de una generación a otra y explotaron en «nothingleftnothingleft» a través de territorios punk, hardcore, industrial y nü-metal.

Rico Nasty suena más familiar, pero también cruza sin tapujos veredas pop, funk, con metal y trap; Ghostemane tiene una fuerte presencia estética y cinematográfica a la que le saca provecho en YouTube y Tik Tok; Lil Darkie suena distorsionado y con letras bien subidas de tono, y su rapeo es uno de los más impresionantes de este género; El semi-enmascarado Scarlxrd es ruido aplastante en una pose alucinante y futurista y la lista sigue. Lo otro que es bueno saber es que ningún disco de todas estas propuestas en su mayoría es plano, lo cual lo hace más diverso y entretenido aún. Y tampoco todas las canciones de estos grupos tienen metal, hay muchas que no. 

Patricio Avendaño

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