Deicide: Un clásico infernal imperecedero

La noche del viernes 19 de mayo no será fácil de olvidar, ya que el culto pagano desatado en Teatro Cariola cumplió por sobre las expectativas con lo más curtido de ese death metal de la vieja escuela, dos de las bandas nacionales destacadas dentro del estilo entregaron lo mejor de sus clásicos temas y una puesta en escena de excelente calidad, Anima Inmortalis y Bonebreaker, los que supieron ganarse a un público exigente en el metal pesado. Por otro lado, los canadienses Kataklysm, encendieron con creces las llamas del averno con lo más pesado de sus álbumes, pero los asistentes en su mayoría esperaban a una de las bandas fundadoras del death y a su líder siempre polémico Glen Benton, Deicide, que desato un infierno vivo y de locura reviviendo íntegramente un clásico imperecedero como lo es su clásico álbum “Legion”.

Teatro Cariola 19:00 horas, Anima Inmortalis se presentaba para encender a los asistentes que comenzaban a llegar al recinto, la banda de death metal nacional entrego una presentación potente que lo acrecienta con sus letras llenas de significados astrales, poesía de vida y muerte con tintes filosóficos, temas de sus álbumes Everlasting de 2005 o de More Than Just Flesh and Blood de 2011, demostraban por qué son unas de las bandas que cultiva el estilo, desatando calidad musical en el metal nacional, ya a las 20:00 horas, los nacionales de Bonebreaker, tenían la misión de seguir encendiendo el fuego del tártaro, Tito Melin ex Undercroft y músicos ex Recrucide, demostraron un death duro y macizo, temas como I Am The Darkness y de su nuevo álbum Hell´s Bullets, todos muy bien recibidos por los metaleros asistentes, los que agradecieron su entrega y calidad, terminando su presentación ovacionados.

Ya a eso de las 21:00 horas, el recinto de San Diego ya estaba a su capacidad máxima, con unos minutos de retardo preparando sonido, y con gran potencia y su gutural tema “Push the Venom”, los canadienses oriundos de Montreal, Kataklysm masacraban a todos, temas de álbumes, Meditations, Serenity in Fire, Shadows and Dust, Unconquered o Heaven´s Venom, sumándole una cercanía palpable hacia el público, lograron desatar más fuego al culto ya iniciado, “Guillotine” y “Narcissist” poseídas en mayor medida por su innato impulso brutal/death/melodic/black mantenido en cada acorde y blast beat a lo largo de su show, “Manipulator of Souls”, “The Killshot” y “Crippled & Broken” que solventan con audacia y sobre todo por la marca detallista grindcore que se hacía notar en ocasiones. “As I Slither”, “In Shadows and Dust”, el Groove extraído del metal moderno más revolucionado; constante y recurrente en cada surco de sus acordes manifestaban su posición y transición al estilo, ya para el final un clásico como, “The Black Sheep” cerraba su presentación, llena de mosh, locura, y agradamiento, lo que fue plasmado con una bandera chilena con el nombre de banda, la que se llevaron con gran respeto.

22:20 horas, después de preparar sonido, de personajes bajando con cuerdas desde la galería a cancha, que la productora del evento pidiera que se respetaran las normas de seguridad, el mismísimo infierno se desata inmisericorde, Glen Benton y compañía dan los primeros acordes de “Satan Spawn, The Caco-Daemon” la que provoco una avalancha de metaleros hacia la barrera  de seguridad, que entre la productora y guardias supervisaban que no cediera, protegiéndola con todos los elementos posibles para que todo se mantuviera en orden, era sabido que la banda de Florida, iba a tocar de forma íntegra su gran y clásico álbum Legion, que además es precursor del estilo hasta la actualidad, encapsula la pura impiedad en su forma más extrema, con baterías superrápidas y riffs llenos de la espesa y caliente eyaculación del diablo. Legion es la tarjeta de presentación para las legiones de verdaderos combatientes de The Unholy One: libran una guerra de muerte. donde solo el metal puede reinar supremo. La velocidad, la intensidad, el odio y la habilidad técnica absoluta hacen de Legion una versión evolucionada, pero similar a su debut homónimo. “Trifixion” y “Holy Deception” son y serán los mejores temas del álbum, cantados y coreados desde principio a fin, para seguir una noche de clásicos, se hace presente “Once Upon The Cross” y “Scars of the Crucifix” de sonidos completos, con un enfoque lirico de Benton llenos de bilis y veneno profano.

En un mundo de muchas bandas de death metal, Deicide está en un plano trascendental completamente diferente: es un documento del trabajo de Satanás en el ámbito físico. Tal exposición a los elementos metafísicos ha dejado a Benton incapaz de canalizar la energía pura del Señor de las tinieblas, por lo que se otorga a la nueva cosecha de jóvenes para que se apoderen de la oscuridad moribunda y renueven su estatus entre los simples mortales.