Disco Inmortal: U2 – Achtung Baby (1991)
Island Records, 1991
Los años 80’s para U2 trajeron muy buenos dividendos. Con el lanzamiento del gran The Joshua Tree en 1987 ya estaban en la cima del éxito y fueron aclamados como la banda de la década inclusive por varios medios especializados. Sin duda que la reunión de Bono con Bob Dylan hizo ver las cosas en retrospectiva al cantante irlandés y donde se declaró por la necesidad de rescatar las raíces de la música americana.
Aunque ese éxito se replicó en su siguiente placa Rattle & Hum (1988), por la mayoría de la crítica y fans fue considerado demasiado pomposo, explotando ya a un nivel extremo las raíces y a los íconos de la música americana. Ejemplos claros como las apariencias en conciertos estilísticas cowboys, referencias a Billie Holliday, la participación compositiva de Dylan y los coros gospel entre otras cosas, de alguna manera saturaron a una audiencia que miraba con extrañeza esta nueva versión de U2. La banda dio cuenta de esto y sabía que para su siguiente paso debería de apelar a un cambio de estrategia.
Y qué mejor giro para desempolvarse de toda esta cultura americana fue lo que ideó U2 como plan de cambio: viajar a grabar a los estudios Hansa en Berlín, Alemania, en pleno levantamiento de la unificación en 1990 dada la reciente caída del muro de la histórica capital germana. Y no es extraño que U2 lo haya hecho, quiso empaparse de esa cultura en la cual se sumergió David Bowie o Lou Reed en el período de los 70’s, mas aún, decidiendo trabajar con Brian Eno, el mismo productor de la trilogía de esos discos de Bowie que se inspiraron en el movimiento Kraut Rock en esos años y quien de aquí en más haría muy buenas migas con los irlandeses.
El 19 de noviembre de 1991 sale a luz este iluminado disco y con este extraño título: Achtung Baby, que de alguna manera representó irónicamente lo que es la cruza de culturas oriente-occidente. «Achtung» como señal de alerta y retirada por los soldados nazis en la guerra, una palabra fría y seca, vs «Baby», muy recurrente en los Estados Unidos como símbolo de sensualidad y dulzura. Era la singular forma de protesta al fascismo de U2, por lo menos de esa forma se representó a grandes rasgos.
La portada del disco contraria a todo el tradicionalismo y sobriedad de sus anteriores placas, llamó la atención de inmediato por esta especie de presentación en sepia o collage de fulminantes colores, un poco inspirada en el disco Exile On Main Street de The Rolling Stones, donde muchas fotos se posicionaban con mucho colorido, dándole una especie de mirada de caleidoscopio. Desde la vista de la portada ya anticipábamos que esto se trataba de algo innovador.
Y es que acá empiezan a aparecer las caracterizaciones de Bono, quien pasó de ser un tipo sermoneador, predicador, como en sus álbumes anteriores, a empezar a encarnarse en distintos personajes apelando a la ironía, ejemplo un poco tomado de Bob Dylan, quien mostró múltiples caretas y personalidades en su período de gloria en los sesenta.
Dentro de esta nueva cara visible de los irlandeses surge como punto de coyuntura el tema ‘The Fly’ donde hay frases decidoras que dejaron perplejos al séquito de fans que admiraban la lírica de Bono por el cristianismo y su fe: «It’s no secret that a conscience can sometimes be a pest» (es verdad que tu conciencia a veces puede ser una peste), acompañado de un video mucho más subversivo y un tema bastante agresivo desde el plano musical además.
Pero el arranque de todo era ‘Zoo Station’, un tema que estaba basado en una línea de tren que ponía de punto de partida a la estación U2, en un trayecto que te iba dirigiendo a estaciones como por ejemplo el Teatro Alemán de la Ópera, temática que estuvo muy presente en la relación de Bono con su padre, y más adelante llega a Nollendor Fplatz, un suburbio donde las contraculturas rigen y escenario de modas alternativas, bares gays, decadencia y donde Zoo Station se sitúa en el medio de todo esto.
El pos modernismo y la temática de la artificialidad es lo que alimenta a ‘Even Better Than the Real Thing’ que también fue lanzado como sencillo, con ayuda de DJ’s de la época fue uno de los primeros temas de U2 pop, bailables, pero manteniendo esa cuota de oscuridad que contenía.
El riesgo que corría Achtung Baby con esta serie de experimentaciones tanto en lo musical como lírico, tenía de alguna forma su póliza de seguro o su cable a tierra con ‘ One’, una balada que reflejó mucho feeling y que hasta el día de hoy es una de sus más grandes canciones. El significado se atribuyó a muchas cosas, incluso U2 lo interpretó en vivo aludiendo a las rupturas sentimentales, a pérdidas, al hambre de los niños en África o al tema del SIDA. Es una canción que puesta desde el punto de vista sentimental funciona siempre, sin tener un objetivo fijo, y eso es lo que más la engrandece.
Otra de las claras referencias bíblicas en este disco acontecen con ‘Until to the End of the World’, donde desde un punto de vista humilde se personifica a Judas y su aspiración a la redención por su gran falta cometida en el jardín de Getsemani, al besar a Jesús como indicio para la capturación de los soldados romanos. En ‘Pride (In the Name of Love)’ también Judas tuvo un papel en la letra de Bono. Nuevamente se asumió una especie de «simpatía por el demonio» de parte de U2 con una canción que simplemente quiso hablar de la traición viéndolo desde el punto de vista del caso más emblemático de la historia de la humanidad.
Y si de cambios se tratan también otro punto importante fue la vocalización de Bono para este disco, muy influenciado por algunos cantantes de los años 50’s y con un claro tinte oscuro, reflejado tal en ‘So Cruel’, una canción que habla del desamor a niveles extremos y la ambivalencia de estar en una relación de amor en el sentido más romántico pero al mismo tiempo saber que hay muchas posibilidades que eso termine de alguna u otra forma haciéndote sentir muy vulnerable y caer en la miseria humana tras ser despojado de ese amor tan sublime.
Una muy buena razón para poder desentrañar de donde surgió esta oscuridad y la ambiguedad en torno a lo sentimental fue la dolorosa separación que tuvo que vivir el guitarrista The Edge en el proceso de este proyecto de disco. En ‘Misterious Ways’ , una canción que se permea-nuevamente- de citas bíblicas en todo su entorno, se refiere a aquello, aunque acá curiosamete de la oscuridad sale a la claridad. En la presentación en vivo de la canción la banda se hizo acompañar de una bailarina haciendo la danza del vientre (clara cita al suceso bíblico con Herodes), y donde finalmente en una especie de representación esta bailarina se casa con The Edge, logrando así una salida casi heroica de la temática misma de la canción y a este sufrimiento.
Achtung Baby es el disco donde la fe ciega de Bono empieza a tambalear, donde pone sobre el tapete un temario tan amplio y cuestionable como el amor y la fe en su forma más condicional pero sin pasarse hacia el otro bando como muchos malinterpretaron. Fue una rebelión a sus discos antecesores y donde a partir de todo un concepto y estética desafiaron sus propios métodos que venían muy gastados.
La gira de este disco llamada Zoo Station fue un concepto casi único y que arrasaba con todas las propuestas de simplicidad impuestas tanto por ellos mismos como por la historia del rock en general. Con una seguridad única arrancando con siete u ocho temas de esta placa mostraba al mundo la desbaratada prisa de los avances y la tecnología. Bono era el protagonista en casi todo el show y cambiaba de personalidad a cada momento, del rockstar ególatra de The Fly pasaba a ser Mr. MacPhisto, que era una especie de representación diabólica del mismo personaje. También lo fue su versión de parodia a los telepredicadores como The Mirror Ball Man que no fue fijo en toda la gira, un personaje de traje plateado completo.
https://youtu.be/ZNwGQ2HIrLk
Era el comienzo de una era en que U2 quiso llevar todo su arte a una grandilocuencia extrema, uno de los tours más espectaculares que no tan solo se basaban en parafernalia, también arrancaban de la idea de un concepto preconcebido para complementarlo.
The Edge comentó: «Zoo Station son cuatro minutos de una televisión que no está sintonizada en ningún canal, muestra lo que sucede cuando se vuela por la estratosfera en la noche. Imágenes de televisón por satélite, el tiempo, el canal de televenta, anillos de diamantes cúbicos de circonio, programas religiosos, teleseries».
Sin duda uno de los discos donde dieron la vuelta de tuerca no tan solo así mismos, si no a la perspectiva de sus fans con respecto a su imagen y que apabulló a su misma historia como banda. Si hay casos de notables reinvenciones en la historia del rock , aquí U2 encontró una de las maneras más inteligentes de hacerlas.
Como dijo Bono alguna vez : «Achtung Baby eran cuatro hombres talando el árbol de Joshua».
Por Patricio Avendaño R.